Quienes usamos alguna distribución de Linux como sistema operativo principal, tenemos la fortuna y ventaja que la gran mayoría de las actualizaciones (de software, seguridad, etc.) se aplican automáticamente una vez descargadas y no requieren el reinicio del sistema para que funcionen adecuadamente. Sin embargo esto no se aplica cuando se lleva a cabo una actualización del kernel de Linux, en donde forzosamente debemos reiniciar el equipo al más puro estilo Windows.

A pesar de esto todo parece indicar que el reinicio obligado tras actualizar el kernel quedará en el pasado, ya que una compañía llamada Ksplice ha desarrollado una nueva tecnología para aplicar parches y módulos al kernel de Linux sin la imperiosa necesidad de reiniciar el sistema. Si bien esto es algo que para los usuarios comunes no causa una molestia mayor, puede ser de gran ayuda en el ámbito de los servidores web, siendo que la mayoría de estos corren con sistemas Linux.

Ksplice Uptrack es el software desarrollado por la compañía antes mecionada y que provee de la tecnología necesaria a nuestra distribución para que -una vez instalado- cuando se realice una actualización, parcheo o adición de módulos al kernel de Linux se elimine la necesidad de reiniciar el equipo de cómputo, permitiendo así aplicar de forma instantánea los cambios y modificaciones instruídos en la actualización.

ksplice uptrack

Si bien Ksplice Uptrack aún se encuentra en su fase de desarrollo, actualmente ya se encuentra disponible un paquete precompilado de instalación compatible con Ubuntu 9.04 Jaunty Jackalope, la última versión de la distribución de Linux más usada en estos días. Al momento de instalar dicho paquete el mismo instalará automáticamente otros paquetes necesarios para llevar a cabo la ejecución, usando su Ksplice Uptrack Manager que en teoría es muy similar al gestor de actualizaciones de Ubuntu.

Sitio oficial y descarga: Ksplice Uptrack